Se encontró un bebé y lo llevó al orfanato. Pero cuando le quitaron su manta, encontraron algo desgarrador.

Qué triste saber que hay mujeres que son capaces de abandonar a sus hijos y que sin tocarse el corazón los dejan a su suerte sin importarles lo que pueda pasar con ellos. Es así como una anciana de 80 años de edad, descubrió algo que le dejó helado el corazón luego de escuchar por horas un extraño ruido, algo así como un llanto y tras no poder estar tranquila hasta averiguar que era, se llevó una gran sorpresa.

Era nada más y menos que un bebé recién nacido envuelto en una pequeña cobijita. Sin pensarlo dos veces la anciana tomó en sus brazos al bebé y lo llevo a una casa hogar pues ella no podía hacerse cargo. Los doctores de allí determinaron que la bebé afortunadamente tenía buena salud. Cuando mucho tenía una semana de nacida y aunque todo parecía estar bien, al quitarle la ropita se encontraron con algo que los dejó helados.

Youtube/Телекомпания ТВК

Entre su ropita se encontraba una carta en la cual decía lo siguiente:

"Sé que no tengo perdón pero no tenía otra opción. Es una nena muy tranquila y sana, no dará problema alguno, la he vacunado. Por ahora no puedo hacerme cargo de ella pero regresaré muy pronto a buscarla. Hemos tenido que pasar dos noches en la calle y esas me han bastado para tomar esta tal vez la peor decisión de mi vida. Su nombre es Uljana y tiene 9 días de nacida".

Con el paso de los días aumentaban el número de familias que deseaban adoptar a la pequeña y aunque nadie creía que la mujer regresaría, decidieron esperar un poco más. Después de un par de días apareció una joven preguntando por su bebé y fue entonces que decidió revelar su conmovedora historia:

Nataljia llegó a la ciudad en busca de mejores oportunidades, sin embargo, con el tiempo conoció a un hombre que la enamoró y embarazó. Mismo que al saberlo le pidió abortarlo pero como ella se negó, él decidió abandonarla.

La compañía para la que trabajaba la despidió luego de saber su estado. Su familia le negó el apoyo y le dijeron no querer verla más. Su mundo se desmoronó pero aun así decidió no abortar. Cada día era un poco más difícil, sobre todo cuando Uljana vino al mundo pues no tenía a quien recurrir ni tampoco un peso en la bolsa. Incluso pidió a los médicos quedarse unos días con la niña pero estos se negaron. Así que tras ser dada de alta, anduvo vagando por las calles con su bebé en los brazos. Incluso tuvieron que dormir en una banca de un parque dos veces y esto la llevó a tomar la decisión de dejarla a cargo de alguien que si pudiera cuidarla.

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Natalja decidió dejarla envuelta en una cobija y se escondió detrás de unos arbustos hasta asegurarse de que alguien había tomado en sus brazos a la pequeña. En un par de semanas consiguió un empleo que aunque no le daba mucho, al menos podía comprar pañales y comida para la bebé. Logro que sus padres aceptaran a Uljana y recurrió a una asociación de mujeres en su situación para que ella y su bebé tuvieran un techo. Sin embargo, al parecer todo había sido en vano pues Natalja terminó perdiendo la custodia de su hija.

A pesar de ello, no perdió la fe y no se dio por vencida y se realizó una prueba de ADN para determinar que ella era la madre. Incluso estuvo dispuesta a someterse a exámenes psicológicos y médicos y fue interrogada por autoridades para que un juez determinara si merecía una segunda oportunidad con su pequeña. Luego de cinco meses de lucha, Natalja recibió la noticia de que su hija estaría de vuelta con ella. Inmediatamente decidió volver a su pueblo y actualmente aun el departamento local de servicios infantiles continúa haciéndole visitas cada cierto tiempo.

Aquí te presentamos detalles de esta historia (en ruso):

La historia terminó haciéndose viral tras los comentarios de las personas que no estaban de acuerdo con la decisión que había tomado el juez mientras que otros más, se mostraron solidarios con Natalja.  Ella nos envía el siguiente  mensaje : 


Sin embargo, lo más importante ahora es que madre e hija se encuentran juntas y Natalja está haciendo todo lo posible por sacarla adelante, aunque claro, la gente opina ¿por qué no hizo lo mismo apenas nació?
 

Finalmente nadie tiene el derecho de juzgar pero si emitir una opinión ¿cuál es la tuya? Compártenosla en los comentarios.

Si apoyas el arrepentimiento de esta  madre no olvides dejar un like. Todos nos merecemos una segunda oportunidad. 

Esperamos que esta mujer sepa valorar esta segunda oportunidad y haga muy feliz a su pequeña.

Fuente: kp.ru / NLC